Bulnes, lunes 26 de julio de 2010:
Visitamos el sector de La Cruz, quizás el lugar más sagrado después de los Templos y quizás el menos respetado por algunos vecinos.
La Cruz, pese a que no es muy maciza, se alza majestuosa en la explanada de la pequeña loma cercana a la población O"higgins y sobresale entre el verdor del pasto y lo gris de las amenazantes nubes del invierno.
Todas las procesiones de la comunidad católica terminan en este lugar y también casi todos los carretes de algunos vecinos. Así se desprende de la gran cantidad de rastros de vehículos y la enorme cantidad de vasos, cajas de vino y botellas de licor desparramados a su alrededor.
Como corresponde, el lugar es abierto y amplio, por lo que cualquier persona tiene acceso, muchas de las cuales también concurren a rezar y a pedir por la solución del problemas que los aqueja.
Pero pese a todo, el lugar se mantiene en buenas condiciones y la maciza cruz de metal que hoy reemplaza a la antigua de madera, emana paz y deseos de quedarse más de lo normal contemplando la parte trasera de nuestra ciudad, ayer carretera panamericana.
